“Así pues, en cierto sentido, la llegada de los tapones de polímero ha permitido a los enólogos, por primera vez, controlar y comprender con precisión el envejecimiento de sus productos”.
¿Cuál es la magia de los tapones de polímero, que permiten controlar por completo las condiciones de envejecimiento, algo con lo que los productores de vino ni siquiera se han atrevido a soñar durante miles de años?
Esto depende de las propiedades físicas superiores de los tapones de polímero en comparación con los tapones de corcho natural tradicionales:
El tapón sintético de polímero está compuesto de su núcleo y capa exterior.
El núcleo del tapón adopta la tecnología de espumado por extrusión mixta más avanzada del mundo. El proceso de producción totalmente automático garantiza que cada tapón sintético de polímero tenga una densidad, una estructura microporosa y unas especificaciones altamente consistentes, muy similares a la estructura de los tapones de corcho natural. Al observarlo con un microscopio, se pueden observar microporos uniformes y estrechamente conectados, que son prácticamente idénticos a la estructura del corcho natural, y presentan una permeabilidad al oxígeno estable. Mediante repetidos experimentos y tecnología de producción avanzada, se garantiza una tasa de transmisión de oxígeno de 0,27 mg/mes, lo que garantiza la respiración normal del vino y promueve su maduración lenta, lo que le otorga mayor suavidad. Esta es la clave para prevenir la oxidación del vino y garantizar su calidad.
Es gracias a esta permeabilidad estable al oxígeno que el sueño milenario de los vinicultores se ha convertido en realidad.
Hora de publicación: 17 de julio de 2023